Tabaré VIERA
Este gobierno regala sorpresas continuamente, fundamentalmente cada vez que
el presidente Mujica hace anuncios.
Pero esta vez fue el ministro de economía y finanzas, Fernando Lorenzo, el
que nos ha sorprendido.
Durante la reunión mantenida hace pocos días por el Ejecutivo y los
legisladores oficialistas, en la tan controvertida reunión famosa por el costo
del traslado de los diputados, el ministro Lorenzo anunció a legisladores y
ministros que este año "habría 140 millones de dólares extraordinarios
para gastar". Esto producto de un nuevo espacio fiscal producido por mayor
recaudación y baja del déficit fiscal.
A partir de allí, en un gobierno populista como éste, la gran preocupación
es como gastarlo.
Frente a este anuncio se nos plantean dos primeros puntos de análisis:
¿existe realmente ese espacio fiscal? Y segundo ¿En el caso que realmente le
sobren estos recursos, en que debería invertirlos el gobierno?
EL DEFICIT FISCAL Y LOS 140 MILLONES
Al comenzar el año, supimos también que el 2011 había arrojado un déficit
de 0,8 % del PBI. Estos es, que el gobierno gastó más de 300 millones de
dólares por encima de lo que recaudó. Monto que lo financia con deuda externa
(que ha crecido mas de un cien por ciento en términos absolutos en los siete
años de gobierno frenteamplista) o con emisión de dinero que significa
inflación.
Entonces ¿Cómo pueden sobrar 140 millones si hubo déficit?
La realidad es que no existe este excedente. Lo que existe es un déficit
menor del proyectado.
Ya habíamos criticado el mal presupuesto nacional aprobado en 2010, porque
entre otras cosas, en el mejor momento económico del país, estableció un
déficit que llegaría hasta el 1,5% del PBI y para este año estaba previsto un
1,1%. Con la voracidad fiscal de esta administración lograron tener un déficit
menor al planteado, pero de ninguna manera "sobra" esa cantidad de
recursos. Es un dato falso que no justifica los gastos que se puedan plantear
alegremente.
¿Qué debería hacer la administración con este ahorro de la perdida
prevista?
A nuestro entender debería ahorrarlo. Gastarlo significará una nueva
contradicción entre "El Pepe" y el discurso de austeridad frente a la
crisis internacional, manifestado por el Presidente Mujica y el Vicepresidente
Astori.
En noviembre del año pasado Mujica declaraba en una nota periodística desde
México refiriéndose a la crisis de países desarrollados : “Todos la vemos fea.
No precisamos ser empresarios ni ser economistas para decir, Esto es muy
grande. Algo nos va a afectar”.
En aquella oportunidad, el mandatario fue claro y reclamó
“austeridad”. Incluso el Poder Ejecutivo
se movió en varios frentes buscando créditos de contingencia ante eventuales
complicaciones en la economía local. Anunciando que si bien en el momento no
los necesitaba, estaba asegurada una fuente de financiamiento con una baja tasa
de interés. Ese hecho era destacado por Mujica como un movimiento estratégico
para prevenir la crisis.
Sin embargo, según trascendió de esa reunión, el Poder Ejecutivo “debatirá
en la interna en qué rubros” gastar y que “resigna la posibilidad de ahorrar”.
LO PEOR: ¿EN QUÉ SE GASTARÁ?
Según declaraciones publicas del Subsecretario de Economía Luis Porto, “Hay
que tener en cuenta que puede haber algunas leyes ya aprobadas que pueden
implicar gastos y hay algunas iniciativas que se están discutiendo,
fundamentalmente en el área social, y
que, de aprobarse, también implican necesidades de fondos adicionales a las
aprobadas en el presupuesto”.
O sea que es muy probable que el gasto venga por el lado "social"
siguiendo la "¿confusión?" entre políticas sociales y
asistencialismo. Mientras inversiones en infraestructura vial, edificios
escolares, hospitales o cárceles esperan por recursos que en cuenta gotas y a
través de nuevos impuestos que con gran imaginación y echando manos a la clase
media trabajadora y al sector productivo como el agro, aparecen.
En tren de usar 140 millones, que como dijimos no se tienen, podrían
considerar, por ejemplo, bajar un punto del IVA y comenzar a cumplir con la
promesa hecha en la oportunidad del mazazo del IRPF; construir 100 escuelas y
40 liceos nuevos, que se caen a pedazos; 7.000 viviendas; construir 140
kilómetros de carretera o 350 kilómetros de vía férrea para transportar la producción.
También se podrían construir 10 hospitales y prácticamente solucionar el estado
verdaderamente ruinosos de centros hospitalarios como el de Rivera capital. La
nueva cárcel de Rivera costó 12 millones de dólares, con 140 se podrían estar
solucionando totalmente el problema carcelario y contener a los delincuentes.
Claro muy probablemente nada de esto ocurrirá, y estos fondos, que
deberíamos ahorrarnos por que no los tenemos, bajo la ilusión de "espacio
fiscal" ira a parar en el clientelismo político de los programas pseudo
sociales del MIDES, o para cubrir imprevisiones de un pésimo presupuesto
nacional.
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