Políticos “hápticos”

Rubens Arizmendi     

¿Cuántas veces el lector habrá oído o leído sobre un político “háptico”?
Seguramente que muy pocas por cuanto el vocablo es una creación de la cibercultura y como tal flota en los inmensos espacio cibernéticos, a merced de quienes saben como disfrutar y aprovechar de las nuevas estructuras literarias y científicas para ubicar en ellas  importantes creaciones que enriquecen el progreso humano .
Ya hay quienes relacionan el trabajo político con bases sensatas que lo ubiquen en defensa de la democracia en vista que ésta se halla cada día más amenazada en su credibilidad. Escribía el senador colorado Ope Pasquet:”Siento que hay que hacer algo, aunque reconozco que todavía no sé qué”.
Esta lucha hay que desarrollarla en un nuevo terreno político donde “el interés común y la mejora misma del Estado son un clamor para que los responsables hagan del gobierno una profesión realmente especializada”, conceptos que actualizamos hoy de Emmanuel Joseph Sieyes, pensador francés, político y escritor en los siglos 18 y 19, Cónsul y Conde del Imperio Napoleónico.
La comunicación en el ciberespacio se ve espoleada por la sed y búsqueda de nuevas experiencias y hallazgos científicos del comportamiento humano, en lo biológico y en las ciencias abstractas. Lo háptico en sentido estricto se refiere a sensaciones, que no tienen que estar vinculadas necesariamente “a  lo visual, auditivo y olfativo”, pero sí con lo intuitivo y visceral. Resulta de esto una muy aceptable definición :
“Un político háptico es la síntesis de varios componentes que se traducen en los siguientes valores humanos : ético, responsable y resiliente en función del bien común “ En la nueva ciberpsicología la palabra “resiliente” se refiere a la capacidad de sobreponerse a situaciones adversas , al dolor producido por fracasos de los cuales no solo puede sobreponerse con entereza sino beneficiarse como oportunidad de aprendizaje y crecimiento. Y quien puede dudar que la grandeza del batllismo se origina en nuestros grandes líderes y su “resiliencia”.     
La tarea política no es – ni lo fue – de un solo hombre. El término “háptico” la entiende como una función que tiene la propiedad de extenderla como un trabajo de equipo, cuya capacitación es un ejercicio constante y espìralado hacia lo abierto, es decir hacia lo cotidiano. Y en este último nivel es que vemos al Presidente Mujica envuelto en dramática y sorprendente búsqueda de soluciones que empiezan a hacer dudar de la coherencia de sus relaciones con los instrumentos que pretende concretar en este novedoso plan quinquenal presupuestario que desdice de sus intenciones revolucionarias o siquiera reformistas.
Insatisfacciones por  todos lados. Manifestaciones y protestas que a nada conducen ante intenciones de arreglar el país según una visión demagógica sesgada y que hace asomar la inexperiencia de un seudopartido político de ocasión,  que no fue partido con estructuras polivalentes sino que hizo valer en todo momento su figura personal única y la “M” de “movimiento”, acciones con las cuales no se encamina al pueblo hacia una organización productiva y progresista. Mujica nunca tuvo como tarjeta de presentación a una institución orgánica llamada “Partido político”, si bien tuvo y tiene la representación de  varios.    
Pero nuestra visión crítica no sería válida si no considerásemos también  visualizar la condición háptica en nuestro propio Partido Colorado y su uso en la política nacional, que como principio fundamental requiere sumergirse en ella por encima de elementos materiales o conveniencias personales  Existen posibilidades de capacitación mundial en esta área. Como buen ejemplo la UNED , Universidad española de Educación a Distancia , líder en formación de investigadores científicos en todas las ramas de la vida ,ha editado entre otras una Guía Didáctica sobre Psicología del Tacto dedicada al estudio  de la integración de la información visual y háptica, con lo que pretende desvanecer ciertas creencias erróneas sobre la reacción de dependencia de las diferentes modalidades sensoriales , incluido el tacto, con respecto de la visión, mostrando como la evolución de las especies ha potenciado el desarrollo de distintas modalidades sensoriales de los individuos, favoreciendo de este modo sus capacidades, dentro de las cuales se halla su visión política .
Y para completar este pequeño desfile de vocablos nuevos de la cibercultura, mencionemos la “interdisciplinariedad” y la “transdisciplinariedad” como parte del ejercicio contemporáneo al que los artistas, profesionales de todo tipo , y los políticos deberán familiarizarse como parte del desafío disciplinar de su época . Igualmente se  deberá comprender que a partir de la tan usual manipulación de los medios la palabra imagen se erige como materia expresiva y la tecnología háptica es su productora. 

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