La educación, principal problema del país

Tabaré VIERA DUARTE
Senador. Intendente de Rivera (2000/2005, 2005/2010). Presidente de ANTEL y director de OSE

Sin lugar a dudas el peor problema que tenemos en el país es la situación de la enseñanza en todos sus niveles.
A mi juicio es mucho más urgente que la inseguridad creciente, la que también es un gran tema y de mucho más notoriedad en la sociedad uruguaya.
En el caso de la educación,  se trata del futuro inmediato de los jóvenes, que es decir el de los uruguayos dentro de cinco o diez años.
Esos compatriotas, adultos de mañana, salen cada vez peor preparados para un mundo cada vez más competitivo, cada vez más dependiente del conocimiento. Precisamente, los indicadores de conocimiento en aéreas básicas como la matemática, y la ciencias en general, demuestran un descaecimiento creciente en los muchachos de quince años.
¿Qué pasa que con el diagnóstico hecho, no hay acciones efectivas para resolver el problema?
El propio presidente Mujica ha hecho críticas a la situación y hasta convocó en forma grave y urgente a las autoridades del CODICEN y de la Universidad, junto al ministro Erlich para urgirlos a una solución.
Recibe críticas de parte de ciudadanos y hasta de dirigentes que lo apoyaron en su campaña electoral, donde se comprometió con la educación.
Basta repasar los conceptos vertidos por la Directora del Liceo Bauzá o del Senador (ex MPP) Jorge Saravia, entre otros.
Hablando claro, los problemas de la educación uruguaya son de gestión. La misma está en manos de los sindicatos y permanentemente en debate. Precisamente el propio Saravia denunciaba:
"Resulta que ahora que Mujica es presidente no puede hacer las reformas comprometidas porque los sindicatos no lo dejan…"
“O Mujica se pone los pantalones o le va a ir muy mal porque hoy tenemos a un partido y a un sindicato gobernando, cosa que es nefasto. El propio Frente Amplio tiene ahí un error conceptual porque puede destruir el gobierno", dijo también Saravia.
Por otro lado los profesores ya no toleran más las condiciones en que tienen que trabajar, saltando de liceo en liceo (profesores “Taxi”) y soportando realidades edilicias muy precarias y en algunos casos realmente ruinosos. A tal punto que se han planteado conflictos sindicales con medidas como paros y hasta denuncias. Precisamente, se ha anunciado recientemente que profesores de Playa Pascual denunciarán penalmente a la ANEP por el uso de contenedores de metal en el liceo, una solución "transitoria" que se implantó hace 17 meses. Se agregó que según Fenapes, el 90% de los liceos tiene algún problema edilicio.
"A pesar de que han pasado más de 17 meses del reconocimiento por parte de las autoridades de que la ampliación era prioritaria, no se ha realizado siquiera el llamado a licitación para la misma", señalan los docentes.
"Seguimos dictando clases en cuatro contenedores de lata, tres salones de yeso (con lo cual perdimos el salón de usos múltiples), con un solo baño para 80 funcionarios, con la biblioteca ubicada al fondo de un pasillo, con un solo laboratorio (siendo un liceo que tiene ciclo básico y bachillerato), con un solo funcionario administrativo de la ANEP (que se encuentra de licencia médica), y sin un lugar para hacer educación física", denuncian los docentes.
VERDADERO CAOS EN LA GESTIÓN
Por otro lado, confirmando el caos en la gestión, el presidente del Codicen, José Seoane, dejó cesante a la directora sectorial de Programación y Presupuesto, Gabriela Cultelli, porque "se olvidó de incluir en el Presupuesto Quinquenal" los programas implementados en el período anterior, según fuentes de la educación.
Uno de los más afectados por el "olvido" fue el Programa de Impulso a la Universalización del Ciclo Básico (PIU) que atendía liceos y alumnos de contexto social crítico. El PIU tenía un costo de $ 40 millones anuales.
Ante la situación, Seoane resolvió, en acuerdo con el resto del Codicen, pedirle a Cultelli la renuncia a su cargo.
En ese momento la funcionaria anunció que lo consultaría con la dirección del MPP tras lo cual aceptó irse. Cultelli y su marido, el senador del MPP Héctor Tajam, son asesores del presidente Mujica.
Los docentes también denunciaron "irregularidades serias" en materia de infraestructura. Pusieron como ejemplo que una empresa cobró $ 50.000 por derribar un pequeño muro en el liceo de Paso Carrasco, Canelones.
El Codicen también removió a la directora de Infraestructura de ANEP, Rosario Lacovazzo.

IMPERIOSO CAMBIO

Hace pocos días visitó nuestro país el compatriota Renato Opertti, Coordinador del Programa de Fortalecimiento de Capacidades Curriculares y de Dialogo Político de la Oficina de Educación de la UNESCO. Ante la comisión de Educación del Senado, recomendó un cambio “radical” del sistema educativo uruguayo y dejó el desafío de nueve puntos en los que el gobierno nacional debería trabajar.
Recomendó algo que está en “la tapa del libro”: un nuevo pacto entre la educación, la política y la sociedad civil. Precisamente, Opertti criticó lo que parece obvio, pero no reconocido por el oficialismo, la falta de apertura de los sistemas  político y educativo para lograr soluciones conjuntas.
“Se transitó por el camino más fácil, priorizando los instrumentos por sobre los objetivos” afirmó el sociólogo. “Las discusiones se centran en ver cuántos liceos se van a construir y no en los objetivos que debe tener el sistema”, agregó.
Recordó Opertti, que en 2010,  UNICEF determinó que los tres problemas de la educación uruguaya son:  su calidad deficitaria; la intolerable inequidad y la excelencia marginal.
Compartimos la necesidad de establecer una  nueva agenda educativa nacional, en la que deberá constar la búsqueda de consensos para un modelo alternativo. Aumentar las exigencias y tareas que realizan los estudiantes, la relación de los docentes con los estudiantes y nuevos criterios de evaluación.
¿Se animará el oficialismo frenteamplista a meter mano a fondo al desgobierno de los corporativismos que ellos alentaron?
Si no es así, al igual que con la seguridad, deberemos plantear desde la minoría instancias de democracia directa. Que opine el soberano también en un plebiscito sobre educación.

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